No voy porque no quiero
- sergiriau
- 13 feb
- 2 Min. de lectura
Actualizado: 4 may
La semana pasada un par de personas por separado me comentaron que aún les parece actual el libro que escribí hace tiempo con mi colega Jaime Guibelalde e ilustrado brillantemente por José M Guibelalde.
¡𝗡𝗼 𝘃𝗼𝘆 𝗽𝗼𝗿𝗾𝘂𝗲 𝗻𝗼 𝗾𝘂𝗶𝗲𝗿𝗼! 𝗢 𝗹𝗮 𝗳𝗶𝗲𝗯𝗿𝗲 𝗱𝗲𝗹 𝗮𝗯𝘀𝗲𝗻𝘁𝗶𝘀𝗺𝗼.
Porque no siempre debe ser aburrido leer y aprender sobre gestión de absentismo. Podréis ver, de manera amena, cómo u𝗻 𝗱𝗶𝗿𝗲𝗰𝘁𝗼𝗿 𝗱𝗲 𝗿𝗲𝗰𝘂𝗿𝘀𝗼𝘀 𝗵𝘂𝗺𝗮𝗻𝗼𝘀 𝘀𝗲 𝗲𝗻𝗳𝗿𝗲𝗻𝘁𝗮 𝗱í𝗮 𝗮 𝗱í𝗮 𝗮𝗹 𝗽𝗿𝗼𝗯𝗹𝗲𝗺𝗮 𝗱𝗲𝗹 𝗮𝗯𝘀𝗲𝗻𝘁𝗶𝘀𝗺𝗼, cómo interpretar sobre 𝗲𝗹 𝗽𝗿𝗼𝗰𝗲𝘀𝗼 𝗱𝗲 𝗱𝗲𝗹𝗶𝗯𝗲𝗿𝗮𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝗱𝗲 𝘂𝗻𝗮 𝗽𝗲𝗿𝘀𝗼𝗻𝗮 𝘁𝗿𝗮𝗯𝗮𝗷𝗮𝗱𝗼𝗿𝗮 ante la decisión de ausentarse, la utilidad de 𝗹𝗮 𝘁𝗲𝗼𝗿í𝗮 𝗱𝗲𝗹 𝗲𝘀𝗽𝗲𝗷𝗼, la importancia de 𝗹𝗼𝘀 𝗺𝗼𝗺𝗲𝗻𝘁𝗼𝘀 𝗱𝗲 𝗹𝗮 𝘃𝗲𝗿𝗱𝗮𝗱 y la imagen que queremos dar en la gestión de la ausencia, pero sobre todo de la presencia.
Y sí, sé que puede ser conflictivo hablar de querer o de no querer, pero en el fondo, cuando hablamos de la gestión del absentismo no nos estamos refiriendo a que una persona venga a trabajar si no puede, 𝗽𝗼𝗿 𝘀𝘂𝗽𝘂𝗲𝘀𝘁𝗼 𝗾𝘂𝗲 𝘀𝗶 𝗻𝗼 𝗽𝘂𝗲𝗱𝗲 𝗻𝗼 𝗱𝗲𝗯𝗲 𝘃𝗲𝗻𝗶𝗿, pero que al menos que cuando pueda venir, quiera venir, pues éste es el diferencial en una gestión de las ausencias.
Es simplemente apelar a 𝘂𝗻 𝘂𝘀𝗼 𝗿𝗲𝘀𝗽𝗼𝗻𝘀𝗮𝗯𝗹𝗲 𝗱𝗲 𝗹𝗮𝘀 𝗮𝘂𝘀𝗲𝗻𝗰𝗶𝗮𝘀, y que si una patología que empieza el martes y tiene una previsión de 7 días, que si puede, quiera venir el martes siguiente y no esperar al lunes de dos semanas después, no?.
Por cierto, si os animáis, las ventas del libro derivadas de este post, son 100% benéficas, aportando el 100% beneficio a un proyecto con el que colaboro desde hace algunos años .Casa Ronald
Así que por interés o por una buena causa, os dejo el link para los interesados.
𝗣𝗼𝗿𝗾𝘂𝗲 𝗲𝗻 𝗲𝗹 𝗳𝗼𝗻𝗱𝗼 ¿𝗤𝘂𝗲𝗿𝗲𝗺𝗼𝘀 𝗱𝗲𝗰𝗶𝗿 𝗾𝘂𝗲 𝗻𝘂𝗲𝘀𝘁𝗿𝗮 𝗲𝗺𝗽𝗿𝗲𝘀𝗮 𝗲𝘀 𝘀𝗮𝗹𝘂𝗱𝗮𝗯𝗹𝗲 𝗼 𝗿𝗲𝗮𝗹𝗺𝗲𝗻𝘁𝗲 𝗾𝘂𝗲𝗿𝗲𝗺𝗼𝘀 𝘀𝗲𝗿𝗹𝗼?
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